Hombres de la materia
Para Tahiche de Juan Pedro Castañeda
Hay hombres que imaginan, trabajan con las manos piadosas del artífice, comen manzanas y juegan a morir.
Cuando meditan tienden a aislarse según leyes no estrictas, ni escritas con anterioridad por los que son como ellos.
Construyen según conceptos transformables. Se alían con la movilidad. Ponen en entredicho a la perfecta esfera. Separan paralelas, rompen círculos…
Se les puede ver en las líneas del tiempo, en los campos fecundos, entre estructuras, armazones, corazones, herramientas y armas.
Creen que les está permitido, además de llegar hasta lo impenetrable, construir mecanismos cuyo fin no es alcanzar la gloria de la cosa perpetua e inmutable.
Bailan junto al reloj, festejan la materia…
Pues que sea para bien; y razonable. ¿Que truncan conos? ¿Que destruyen pirámides? Si rompen moldes o manipulan formas, que consigan fragmentos que añadir al afán constructor.